¿De qué se compone un Balance de Situación? Te explicamos las claves para crear su estructura y porqué es esencial en el análisis económico y financiero.
El Balance de Situación en las Cuentas Anuales
Para realizar un análisis económico y financiero, necesitamos obtener la información contenida en las denominadas Cuentas Anuales. Éstas se componen del Balance de situación, Cuenta de Pérdidas y Ganancias (también denominada Cuenta de Explotación), Estado de Cambios en el Patrimonio Neto, Estado de Flujos de Efectivo y la Memoria.
Aquí nos centraremos en el Balance de Situación.
Así pues, las auditorías contables recopilan toda la información requerida para la elaboración de las Cuentas Anuales y se encargan de ofrecer una valoración de su principal objetivo: mostrar la imagen fiel del patrimonio, situación financiera y resultados de la empresa.
Os dejo por aquí un ejemplo de las Cuentas Anuales presentadas por la misma Agencia Tributaria en los pasados ejercicios. Se encuentran a disposición del público en su página web.
Entre los estados financieros más conocidos, y que destacaremos a continuación dada toda la información relevante que nos ofrece para la toma de decisiones empresariales, encontramos el Balance de situación y la Cuenta de Pérdidas y Ganancias.
Balance de situación
El Balance de situación es un estado financiero que se define como una captura o fotografía del patrimonio empresarial en un momento del tiempo determinado. Muestra sus bienes y deudas contraídas existentes al final del ejercicio.
A menudo, el cierre del ejercicio se produce a final de año, aunque esto puede variar en función del sector y la actividad económica de la empresa. En caso de que el ejercicio económico coincida con el año natural (es decir, empieza el 01/01/20XX y finaliza el 31/12/20XX), el momento para presentar el Balance de situación será a comienzos del año siguiente (normalmente Enero).
Siguiendo con el análisis económico-financiero mediante ratios, es básico saber en qué partes se divide un Balance:
Estructura Económica
Activos
Los activos constituyen los Bienes y Derechos con que cuenta una empresa, así como otros recursos controlados económicamente por ésta. Estos activos son la base en que se sustenta el funcionamiento de toda empresa (terreno, instalaciones, maquinaria, clientes, tesorería …). Son financiados gracias a la llamada Estructura Financiera, la cual veremos más adelante.
Los activos pueden dividirse en dos grupos en función de nivel de «rotación», su vencimiento o permanencia en la empresa a lo largo del año. Hablamos de Activo Corriente (AC) y Activo No corriente (ANC). El Activo Corriente es aquel relacionado directamente con el ciclo de explotación de la empresa (clientes y demás derechos de cobro, tesorería, existencias, bancos, inversiones a corto plazo…), mientras que el Activo No Corriente o Inmovilizado son aquellos que no cumplen los requisitos para ser clasificados como AC, es decir, permanecerá en la estructura económica durante un periodo de tiempo superior al año.
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Estructura Financiera
La estructura opuesta a la estructura economica es la financiera, caracterizada por presentar aquellos recursos o fondos necesarios para financiar los activos adquiridos, así como mantener a lo largo del tiempo la actividad empresarial.
Patrimonio Neto (PN)
El Patrimonio Neto de una empresa presenta aquellas aportaciones de capital por parte los socios, remanente y reservas (voluntarias u obligatorias). Éstas últimas reúnen los resultados de la actividad que no han sido destinados al reparto de beneficios.
Es importante que la empresa se encuentre financiada en su mayor parte gracias a los Fondos o Recursos Propios, ya que el endeudamiento externo (en especial la deuda financiera con entidades bancarias) lleva ligado el pago de intereses (incremento de la deuda).
Pasivo (P)
Cuando hablamos de Pasivo hacemos referencia a aquellas deudas u obligaciones contraídas por la empresa, para cuya extinción debe deshacerse de activos y/o recursos que generen rendimientos futuros.
Asimismo, dentro del Pasivo encontramos las llamadas Provisiones. Surgen ante el entorno incierto e imprevisible en que actualmente se encuentra el mercado. Son aquellas obligaciones que, bien a corto o largo plazo, indican claramente la naturaleza o función por la que son creadas, pero al cierre del ejercicio no se conoce con seguridad su importe total ni la fecha en que se llevarán a cabo.
Al igual que sucede con los Activos, el Pasivo se encuentra dividido en dos grandes grupos: Pasivo Corriente (PC) y Pasivo No Corriente (PNC). El PC hace referencia a aquellas deudas y obligaciones que están directamente relacionadas con el ciclo de expotación de la empresa, aquellas deudas con un vencimiento máximo de 1 año, así como valores financieros mantenidos en la empresa para negociar (especular). Por otro lado, el PNC incluye todas aquellas deudas que no cumplen los requisitos para ser claisificados como PC, como por ejemplo, obligaciones con periodos de vencimiento superiores al año.
Modelo de Balance de Situación
Para realizar el análisis económico-financiero es importante recopilar información de los Estados Financieros (Balance de Situación y la Cuenta de Pérdidas y Ganancias).
Así pues, en esta primera parte, vamos a centrarnos en la manera en que se presenta un Balance de Situación en las Cuentas Anuales de una empresa.
Por otro lado, podemos encontrar un modelo abreviado, y el modelo normal, en el que se especifican todas las subcuentas posibles de cada categoría. Además, los modelos muestran los saldos del ejercicio actual y el inmediatamente anterior para obtener una comparación de la evolución de la compañía de manera rápida y clara.
Si quieres conocer cuándo aplicar el modelo abreviado y normal, en función de los requisitos exigidos según la legislación mercantil, entra en nuestra entrada y podrás visualizar además ambos balances y sus principales diferencias.
A continuación mostramos un ejemplo de un Modelo de Balance de situación abreviado. Como vemos, existe una columna destinada al año actual y al inmediatamente anterior. También es posible encontrar una columna destinada a las anotaciones de la Memoria, así como otra en la que se detalla la cuenta contable empleada.
Elaboración propia
Conclusión
Con todo esto hemos conocido qué información del Balance de Situación es más importante para el análisis económico-financiero.
Además, en relación al Balance de Situación construido bajo el Modelo Abreviado de Cuentas Anuales, os dejo un vídeo sobre las particularidades de este modelo.
Bibliografía
BONSÓN, E., CORTIJO,V. y FLORES F. (2009). Análisis de Estados Financieros. Madrid: Pearson Educación, S.A.
ARCHEL,P., LIZARRAGA, F., SÁNCHEZ, S., CANO, M., (2010). Estados Contables. Elaboración, análisis e interpretación. Madrid: Ediciones Pirámide.
